Sobre el antiguo pueblo de Grimaldi se alza una elegante villa de aproximadamente 250 m2, ideal para aquellos que, teniendo una conexión estrecha con la naturaleza, buscan experiencias únicas. Nos encontramos en Grimaldi Superiore, a solo unos kilómetros de las playas de Balzi Rossi y cerca de los exuberantes jardines Hanbury, en un punto del territorio italiano donde la frontera entre Italia y Francia es más un recuerdo de la fascinante dinastía Grimaldi que una línea divisoria.
Atravesando el encantador pueblo, se llega a un largo camino de entrada a la villa, rodeado de un pintoresco jardín exótico con vista al mar. La villa de Grimaldi no se puede describir sin mencionar su valor interno único, fruto del amor y cuidado por el mundo botánico. Los propietarios han reunido a lo largo de los años una colección excepcional de plantas, transformando el jardín en un viaje sensorial.
La villa se distribuye en dos niveles e incluye:
- En la planta baja se encuentra un amplio comedor, una cocina funcional y totalmente equipada, una despensa y una lavandería con baño. También en este nivel hay un dormitorio con terraza y vista al mar, con baño y jacuzzi.
En la planta superior, a la que se puede acceder por una escalera interna o externa, se encuentra una amplia sala de estar con chimenea y grandes ventanales que dan a la terraza y a la zona de barbacoa con vista al mar. En este nivel también hay dos dormitorios y dos baños.
En el terreno de la villa hay una casa de invitados que consta de una sala con cocina y vistas a Mónaco y la Costa Azul, así como un baño. Junto a la piscina hay una pequeña habitación con baño para el personal de servicio.
La propiedad cuenta con un amplio estacionamiento para 10 coches y un área de juegos al aire libre, lo que garantiza confort y bienestar. Esto permite disfrutar de la vida en belleza, privacidad y seguridad en cualquier época del año. Si se desea, el estacionamiento se puede transformar en un helipuerto.
El jardín, de aproximadamente 5000 m2, se ha convertido en una verdadera celebración del paso del tiempo. A medida que se desarrolla, las plantas en este querido jardín crean espacios que se transforman en verdaderas obras de arte, cambiando con las estaciones, llenando el ambiente de aromas y colores.
El jardín de la villa Grimaldi es un auténtico tesoro botánico con un rosal, árboles cítricos, flores exóticas y la característica vegetación rayada de la región de Liguria. Desde la villa se accede a una amplia terraza con piscina que combina los colores de la Riviera y los matices de la Riviera Francesa.
